Déficit nacional de cualificaciones
Reaching YES: Addressing the Youth Employment and Skilling Challenge, señala que los jóvenes de entre 15 y 24 años son incapaces de identificar qué cualificaciones necesitan para futuras oportunidades de empleo. Los jóvenes tampoco pueden acceder a la formación pertinente y los empresarios carecen de un método normalizado para verificar las competencias que dicen tener los nuevos empleados.
El informe señala que existe una desconexión entre las necesidades y los sistemas de educación y formación. Por ejemplo, los jóvenes que no pueden acceder a Internet no pueden acceder a oportunidades de formación en línea. Cuando se adquieren competencias, los jóvenes necesitan un modo de hacer un seguimiento verificable, preciso y seguro de las mismas y de compartirlas con los empleadores.
“Si observamos el mundo actual, vemos un enorme desajuste entre las competencias que tienen los jóvenes y las que necesitan los empresarios. Sin oportunidades para adquirir las competencias adecuadas, millones de jóvenes tendrán dificultades para encontrar trabajo y corren el riesgo de quedarse atrás. No podemos permitir que eso ocurra. Por eso es crucial que los gobiernos, las empresas, los educadores y los líderes de la sociedad civil se unan rápidamente, más que nunca, para abordar esta brecha. Al hacerlo, podemos empezar a crear resultados sostenidos para los jóvenes y economías y sociedades más inclusivas”, ha declarado Bob Moritz, Presidente Mundial de PwC.
¿Por qué es necesario desarrollar las capacidades de los jóvenes?
Las bajas cualificaciones perpetúan la pobreza y la desigualdad. Cuando se hace bien, el desarrollo de competencias puede reducir el desempleo y el subempleo, aumentar la productividad y mejorar el nivel de vida. Ayudar a las personas a desarrollar y actualizar sus capacidades tiene sentido desde el punto de vista económico.
¿Por qué la juventud es el futuro de un país?
Los jóvenes no sólo representamos el futuro de nuestro país, sino que somos uno de los principales agentes de cambio y progreso de la sociedad. También tenemos un gran efecto en el desarrollo económico. En esta etapa de nuestras vidas, establecemos muchas relaciones sociales y desarrollamos una personalidad que nos define como nueva generación.
¿Cómo puede la juventud cambiar el futuro de Pakistán?
Los jóvenes pueden facilitar la consecución de cambios sociales positivos participando y mostrando una implicación activa en la comunidad, demostrando por qué se les conoce como los “agentes activos del cambio”. Su potencial y sus capacidades pueden ayudarnos a dar forma a una vida mejor en la comunidad y a superar los problemas críticos de Pakistán.
Los jóvenes son el futuro ensayo
El acceso a una gama completa de competencias cambia la vida de los jóvenes y sus comunidades. Cinco tipos de competencias son fundamentales para el futuro de los jóvenes: básicas, digitales, empresariales, transferibles y específicas del puesto de trabajo.
La aportación de tu organización puede ayudar a impulsar el interés en sectores con carencias de competencias. Y saber qué profesiones es probable que estén disponibles para los jóvenes en el futuro puede ayudarles a adaptar su itinerario de formación para que coincida.
Ser mentor implica dar consejos prácticos y orientación profesional. Dirija a sus empleados hacia recursos de formación que puedan ayudar a los jóvenes a los que apoyan a progresar hacia sus objetivos profesionales.
Una iniciativa de este tipo es la Girls’ Education Skills Partnership -integrada por el Gobierno británico y empresas de todo el mundo-, que formará a un millón de chicas y mujeres de entre 13 y 24 años. Se centra en las habilidades para promover el éxito de las jóvenes en los campos de la ciencia, la tecnología, la ingeniería y las matemáticas.
En su lugar, busca “microcredenciales” (para completar cursos cortos y formación) y certificados no estándar. Hay todo tipo de vías para adquirir competencias, y encontrarlas suele ser un logro en sí mismo.
Estadísticas sobre el déficit de cualificaciones 2022
A diario, muchos de nosotros hacemos demasiadas cosas y nos detenemos demasiado poco. Rara vez podemos dar un paso atrás y examinarnos a nosotros mismos y a los demás. El propósito de este seminario es bajar el ritmo juntos para poder hacer frente a los retos urgentes de nuestro trabajo con los jóvenes. Este encuentro es una oportunidad para mantener esas conversaciones auténticas que no solemos tener: sobre los sueños que impulsan el trabajo que hacemos, las luchas que atravesamos y la magia que nos hace seguir adelante. Se trata de un seminario de cinco días creado conjuntamente en el que invitamos a 22 trabajadores juveniles en activo a reflexionar, compartir, inspirarse, construir comunidad y crear nuevas posibilidades.
Este seminario se centra en 3 niveles de desarrollo, exploración y soluciones dentro del campo del trabajo juvenil para y por trabajadores juveniles de todos los diferentes entornos de trabajo. Creemos que para crear un marco bien redondeado, navegar a través de las formas personales, interpersonales y sistémicas de cambio es un punto de partida crucial.
Puedes esperar una mezcla de diversos métodos de educación no formal como diálogos facilitados, reflexión individual, creación de equipos, juegos, trabajo en grupo, indagación apreciativa, espacio abierto, pasar el rato (¿sabías que las sesiones más valoradas en muchas conferencias son las pausas para el café?), … El programa será co-creado por los participantes y adaptado a las necesidades concretas, retos e intereses de los participantes seleccionados.
Reducir las diferencias de cualificación entre el trabajo y la educación
Múltiples estudios han documentado que un gran número de puestos de trabajo están en peligro a medida que los dispositivos programados -muchos de ellos sistemas inteligentes y autónomos- continúan su marcha hacia los lugares de trabajo. Un estudio reciente realizado por economistas laborales concluyó que “un robot más por cada mil trabajadores reduce la relación empleo-población en unos 0,18-0,34 puntos porcentuales y los salarios en un 0,25-0,5 por ciento”. Cuando el Pew Research Center y el Imagining the Internet Center de la Universidad de Elon preguntaron a expertos en 2014 si la IA y la robótica crearían más puestos de trabajo de los que destruirían, el veredicto se dividió por igual: El 48% de los encuestados vislumbró un futuro en el que se perderían más empleos de los que se crearían, mientras que el 52% dijo que se crearían más empleos de los que se perderían. Desde aquel sondeo de expertos, el futuro del empleo ha ocupado un lugar destacado en el orden del día de muchas grandes conferencias mundiales.
Se han promovido varias soluciones políticas y basadas en el mercado para hacer frente a la pérdida de empleo y salarios prevista por tecnólogos y economistas. Una idea clave que surge de muchas conversaciones, incluido uno de los debates centrales del Foro Económico Mundial en 2016, es que los cambios en los entornos educativos y de aprendizaje son necesarios para ayudar a las personas a mantenerse empleables en la fuerza laboral del futuro. Entre las seis conclusiones generales de un nuevo informe de 184 páginas de las Academias Nacionales de Ciencias, los expertos recomiendan: “El sistema educativo tendrá que adaptarse para preparar a las personas para el cambiante mercado laboral. Al mismo tiempo, los recientes avances informáticos ofrecen formas nuevas y potencialmente más accesibles de acceder a la educación.”