Cómo utilizar la crema de progesterona para la fertilidad
La progesterona es una de las dos hormonas femeninas que desempeñan un papel importante en la reproducción y la salud sexual. La otra hormona clave es el estrógeno. La progesterona, como su nombre indica, es la principal hormona progestacional, responsable de la salud de tu ciclo menstrual y esencial en la concepción y el embarazo.
Durante la primera parte del ciclo, también llamada fase folicular, se supone que los niveles de progesterona son bajos. Tras la ovulación, la progesterona es producida por el folículo del que se ha liberado el óvulo. Los niveles de progesterona aumentan tras la ovulación y siguen creciendo durante la fase lútea, la segunda mitad del ciclo.
Una de las principales funciones de la progesterona es nutrir el revestimiento uterino y prepararlo para la implantación de un embrión, en caso de que se produzca la fecundación. Mientras que los estrógenos engrosan el revestimiento durante la primera mitad del ciclo, la progesterona lo estabiliza y lo hace lo suficientemente “pegajoso” para que el embrión se implante. Sin suficiente progesterona, puede ser más difícil concebir.
Efectos secundarios de la progesterona
La progesterona pertenece a un grupo de hormonas esteroideas denominadas “progestágenos” (que son hormonas que tienen una acción similar a la hormona natural progesterona). Las hormonas sintéticas que tienen una acción similar a la progesterona se denominan “progestinas”. La progesterona es segregada principalmente por el cuerpo lúteo del ovario durante la segunda mitad del ciclo menstrual. Desempeña un papel importante en el ciclo menstrual y en el mantenimiento de las primeras fases del embarazo.
Durante el ciclo menstrual, cuando se libera un óvulo del ovario en el momento de la ovulación (aproximadamente el día 14), los restos del folículo ovárico que encerraban el óvulo en desarrollo forman una estructura denominada “cuerpo lúteo”, que literalmente se traduce como “cuerpo amarillo” debido a su aspecto. Éste libera progesterona y, en menor medida, estradiol. La progesterona prepara al cuerpo para el embarazo en caso de que el óvulo liberado sea fecundado. Si el óvulo no es fecundado, el cuerpo lúteo se rompe, la producción de progesterona disminuye y comienza un nuevo ciclo menstrual.
Cuándo iniciar la progesterona después de la ovulación
La progesterona, una hormona natural del organismo, es producida por el cuerpo lúteo, una estructura secretoria de hormonas que se desarrolla a partir del folículo tras la liberación del óvulo. También la produce la placenta durante el embarazo. Cada mes, el ovario libera progesterona, que induce la maduración del revestimiento uterino como preparación para el embarazo. Cuando los niveles de progesterona son anormales, la persona puede experimentar menstruaciones irregulares, pérdida del embarazo o infertilidad…
La progesterona desempeña un papel fundamental en la reproducción. Su síntesis por el ovario se inicia con la ovulación. Se necesitan cantidades suficientes para que el revestimiento del útero esté listo para la implantación del embrión y el mantenimiento del embarazo. Si esta producción es insuficiente, puede ser necesario administrar suplementos. Antes de las ocho semanas de gestación, la producción de progesterona procede principalmente del cuerpo lúteo situado en el ovario. Es fundamental que los niveles de progesterona favorezcan el embarazo durante estas primeras etapas para evitar la pérdida del embarazo. Después de ese periodo, la progesterona procede principalmente de la placenta del feto en crecimiento.
Dosis de progesterona para la fertilidad
Si estás intentando concebir, probablemente quieras asegurarte de que entiendes qué influye en tus posibilidades de quedarte embarazada. Aunque hay muchas piezas en el rompecabezas del embarazo, la progesterona es una de las más importantes.
La progesterona es una hormona reproductiva femenina, necesaria para favorecer la implantación y el embarazo, por lo que también se la suele llamar la “hormona del embarazo”. Junto con el estrógeno, es una de las principales hormonas que trabaja para regular nuestros ciclos.
Después de la ovulación, comienza la segunda fase del ciclo, también llamada fase lútea. Durante la fase lútea, el folículo del que ha salido el óvulo se convierte en cuerpo lúteo. El cuerpo lúteo empieza a producir progesterona, que hace que el revestimiento uterino, ya engrosado, sea lo suficientemente “pegajoso” para que el embrión pueda implantarse cómodamente.
El cuerpo lúteo es una estructura temporal, que dejará de segregar progesterona y se desintegrará justo antes de la siguiente menstruación, si no se produce el embarazo. Esto hace que el útero se desprenda de su revestimiento, lo que significa que comienza la menstruación.