Los intereses de los jóvenes hoy
El futuro de los jóvenes de todo el mundo está siendo devastado por los efectos del cambio climático, lo que les obliga a movilizarse y actuar. Los jóvenes están asumiendo funciones de liderazgo en sus comunidades, en los gobiernos locales e incluso se están convirtiendo en negociadores juveniles para llevar su urgente necesidad de resiliencia climática a la toma de decisiones nacionales e internacionales. Sin embargo, hay pocos programas o redes de apoyo al liderazgo para jóvenes líderes en resiliencia climática.
“Los jóvenes están abriendo el camino para llamar la atención mundial sobre la crisis climática; asumen las consecuencias económicas y sociales a largo plazo de tensiones y crisis como pandemias o conflictos, así como los impactos a corto plazo en primera línea. A pesar de ello, rara vez participan de forma significativa en la toma de decisiones, ni se les compensa adecuadamente por el increíble papel que desempeñan en la sociedad como audaces agentes de cambio y proveedores de soluciones. Esto tiene que cambiar si queremos lograr un futuro equitativo en un planeta sano”.
El Youth Resilience Hub ofrecerá a los líderes emergentes una serie de experiencias y capacidades necesarias para que puedan asumir y desempeñar funciones de liderazgo con confianza, durabilidad, creatividad y pericia. Su objetivo es proporcionar los medios, el apoyo, las capacidades, el espacio y la confianza para que los jóvenes participen de forma significativa en la política y la programación climáticas, ayuden a remodelar las instituciones e influyan en la toma de decisiones.
¿Cómo pueden prepararse los jóvenes para el futuro?
Cuatro competencias clave para los jóvenes del siglo XXI
Habilidades cognitivas avanzadas (como el pensamiento crítico y la resolución de problemas) Habilidades relacionadas con la función ejecutiva (como la autorregulación y la metacognición) Habilidades socioemocionales (como la autoestima, la adaptabilidad, la creatividad, la perseverancia y la empatía).
¿Por qué son importantes los jóvenes para el futuro?
Los jóvenes no sólo representamos el futuro de nuestro país, sino que somos uno de los principales agentes de cambio y progreso de la sociedad. También tenemos un gran efecto en el desarrollo económico. En esta etapa de nuestras vidas, establecemos muchas relaciones sociales y desarrollamos una personalidad que nos define como nueva generación.
Ser joven hoy
Ser joven es sinónimo de cambio, progreso y futuro. Ser joven es, en definitiva, afrontar retos y crear o recrear un espacio para el pleno desarrollo futuro. Significa convertir los problemas en oportunidades y soluciones y ser el motor de la sociedad.
Hoy, en el Día Internacional de la Juventud 2020, celebramos sus visiones y sus elecciones, celebramos el “Compromiso de los jóvenes para la acción mundial”, un lema que pretende destacar las formas en que los jóvenes se comprometen a nivel local, nacional y mundial.
Los retos mundiales, como la pandemia de coronavirus o el cambio climático, así como los problemas locales, tendrán repercusiones en el futuro. Es hora de ver en qué medida afectan a la población más joven y de avanzar en las soluciones. Las personas de 14 a 29 años representan la generación más numerosa de la historia.
Nos pusimos en contacto con varios jóvenes cubanos para conocer sus visiones, su papel en la sociedad como individuos y como parte de la población. Desde el punto de vista de su individualidad, estos jóvenes miran la sociedad en la que les ha tocado vivir y cómo hacerla suya. Se les plantearon dos preguntas, a las que dieron respuestas compartidas. ¿Cuál crees que es el papel de los jóvenes hoy en día? ¿Qué haces desde tu posición para ayudar a los jóvenes?
Edad de los jóvenes
Este artículo forma parte de la serie de Forum Network sobre Digitalización. Pero esto no es todo: estés donde estés, conviértete en miembro de la comunidad mundial de la Red del Foro para comentar a continuación y continuar la conversación.
En un estudio que acaban de publicar la OCDE y WorldSkills, con aportaciones de Educación y Empresarios, se preguntó a los jóvenes por su grado de conocimiento de los cambios que afectan al nuevo mundo laboral y por su confianza en su capacidad para afrontarlos. Los resultados no pintan un panorama halagüeño para nuestros sistemas de aprendizaje y, aunque conocemos grandes ejemplos de jóvenes a los que se les brindan las oportunidades adecuadas, tenemos que encontrar la manera de ampliar estas historias de éxito para construir un mundo laboral más inclusivo.
A pesar de ciertas inquietudes en torno al futuro del trabajo, los jóvenes expresaron que son conscientes de los retos que se avecinan, especialmente en lo que respecta a la tecnología. Casi el 56% de los jóvenes se siente optimista respecto a que la tecnología contribuirá a generar nuevos puestos de trabajo. Sin embargo, este optimismo no debe eclipsar el temor que expresaron sobre el impacto de la tecnología en el mundo laboral y en sus propias perspectivas profesionales. Alrededor del 47% de los jóvenes teme no tener acceso a empleos fijos a tiempo completo debido a la digitalización.
Qué le pasa a la juventud de hoy
Con la población más joven del mundo, África tiene ahora la oportunidad de transformar su futuro. Más del 70% de la población tiene menos de 30 años. Sin embargo, esta promesa de transformación sigue sin aprovecharse. Muchos de estos jóvenes están desempleados o subempleados, con pocas perspectivas de encontrar un trabajo digno y satisfactorio. El desfase entre las cualificaciones de los jóvenes y el mercado se cita a menudo como una de las razones de esta desconexión.
Es urgente impulsar la educación y el desarrollo de competencias, tal como se indica en los Objetivos de Desarrollo Sostenible. La meta 4.4 de los ODS pide “un aumento sustancial del número de jóvenes y adultos que poseen las competencias pertinentes”. Sin embargo, nuestro sistema actual se está quedando corto. Los datos demuestran que, en muchos casos, la educación formal no está satisfaciendo las necesidades de aprendizaje de los jóvenes y los diversos espacios de trabajo de África.
Con el aumento exponencial de los avances tecnológicos, la brecha de cualificaciones es cada vez mayor. La capacidad tecnológica se considera actualmente la habilidad más importante que se requiere. No se puede subestimar el valor de la competencia tecnológica. Sin embargo, los jóvenes de hoy necesitan cultivar un nuevo conjunto de inteligencia y habilidades para seguir el ritmo vertiginoso de este mundo cambiante.