El futuro es ahora: Aumentar el acceso de los transexuales a la atención sanitaria
En la conferencia Arctic Frontiers 2021, Joel Clement pronunció el discurso de apertura del panel “Construir el futuro”. Su inspirador discurso fue una oda a la capacitación de los jóvenes y a la construcción de un Ártico resiliente, y una reflexión sobre los debates del Foro de Resiliencia Ártica 2020.
Mientras imaginaba ese futuro, me sorprendí al darme cuenta de que cuando los veinteañeros de hoy tengan mi edad y alcancen su madurez profesional, será el año 2055. En ese momento, si hacemos bien nuestro trabajo, el ritmo de calentamiento del Ártico habrá alcanzado su punto máximo. Esto no quiere decir que el Ártico empiece a enfriarse y acabe volviendo a la normalidad, porque eso no va a ocurrir en un plazo de tiempo relevante para la sociedad. Pero el ritmo de cambio, que actualmente se acelera de forma alarmante, debería empezar a ralentizarse. Si hacemos ahora nuestro trabajo para limitar las emisiones de gases de efecto invernadero.
En 2055, habiendo crecido con cambios rápidos, sin conocer el antiguo statu quo, estos jóvenes sabrán a lo que se enfrentan y habrán desarrollado nuevos sistemas para prosperar en un Ártico más cálido, húmedo, verde y marrón. Sabrán cómo minimizar los daños de los incendios forestales, habrán desarrollado protocolos para proteger las tierras y las aguas de las especies invasoras, habrán aprendido a garantizar la seguridad del agua dulce y a anticipar y predecir mejor lo que se han convertido en migraciones de fauna altamente inciertas.
Construir nuestro futuro
El Estudio de Impacto del Programa Jóvenes Construyendo El Futuro, elaborado por la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (Conasami), con datos de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2020 del INEGI, señaló resultados positivos para los beneficiarios, los más relevantes son:
Para 2030, eliminar las disparidades de género en la educación y garantizar la igualdad de acceso a todos los niveles de educación y formación profesional para las personas vulnerables, incluidas las personas con discapacidad, los pueblos indígenas y los niños en situación de vulnerabilidad.
Índices de paridad (mujer/hombre, rural/urbano, quintil inferior/superior de riqueza y otros como la situación de discapacidad, los pueblos indígenas y los afectados por conflictos, a medida que se disponga de datos) para todos los indicadores de educación de esta lista que puedan desglosarse.
De aquí a 2030, velar por que todos los educandos adquieran los conocimientos y competencias necesarios para promover el desarrollo sostenible, entre otras cosas, mediante la educación para el desarrollo sostenible y estilos de vida sostenibles, los derechos humanos, la igualdad entre los géneros, la promoción de una cultura de paz y no violencia, la ciudadanía mundial y la apreciación de la diversidad cultural y de la contribución de la cultura al desarrollo sostenible.
El camino hacia una aplicación de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información que incluya a los jóvenes
Los jóvenes rurales de todo el mundo se enfrentan a un dilema similar. Sus raíces están en sus hogares rurales, pero a menudo es difícil labrarse un futuro allí. Sin acceso a recursos, educación o financiación, no pueden ganarse la vida dignamente, mantener a sus familias o contribuir a las economías locales.
No es de extrañar que muchos jóvenes sientan que su única opción es emigrar a las ciudades, o incluso a otros países. Y, cuando los jóvenes se marchan, se llevan consigo su energía, dinamismo e innovación, lo que dificulta aún más el florecimiento de las zonas rurales.
Empezó produciendo arroz y vendió casi dos toneladas. Luego reinvirtió sus beneficios en el comercio de ropa usada, comercializando sus productos en las redes sociales. Ahora también se dedica al comercio de pollos, comprando muslos de pollo en la ciudad y vendiéndolos en su pueblo.
El grupo juvenil Wazo Jema surgió de la idea de diez jóvenes que luchaban por encontrar trabajo en el este de Kenia, donde el desempleo juvenil es elevado. Se unieron para poner en marcha un negocio de productos lácteos: compraban leche cruda a los granjeros, la pasteurizaban y la transformaban en productos como yogur y ghee.
Diálogo africano Y4S: Fomentar la adaptabilidad de los jóvenes
Cita: Whitley, M.A., Massey, W.V., Farrel, K. A programme evaluation of ‘Exploring Our Strengths and Our Future’: Making sport relevant to the educational, social, and emotional needs of youth. Revista del deporte para el desarrollo. 2017; 5(9): 21-35.
El modelo de Enseñanza de la Responsabilidad Personal y Social (TPSR) es uno de los principales enfoques basados en el deporte y la actividad física para fomentar el PYD.12 La programación intencional facilita el desarrollo de la responsabilidad personal y social, guiando a los jóvenes a través de cinco niveles progresivos del modelo TPSR. En el cuadro 1 se describen estos niveles y un modelo de formato de sesión.
Estos son ejemplos del creciente número de programas basados en el deporte que utilizan el modelo TPSR en comunidades con pocos recursos. Sin embargo, existe la necesidad de una evaluación más rigurosa de estos programas,16 incluidos los análisis de la implementación del programa a través de múltiples métodos (por ejemplo, observación, autoinforme, entrevistas e instrumentación), lo que permite una comprensión más matizada de la conexión entre la implementación y los resultados.17,18 Es importante destacar que para los académicos y profesionales que utilizan programas de DPI basados en el deporte en el contexto de la violencia comunitaria persistente, se necesita más conocimiento sobre cómo la estructura y la implementación del programa pueden conducir a resultados que afectan las necesidades educativas, sociales y emocionales de los jóvenes. Una reciente revisión integradora de la literatura sobre el PYD basado en el deporte revela lo siguiente: