Qué no decir a alguien con problemas de salud mental
Padecer una enfermedad mental puede afectar a los familiares y amigos de una persona de muchas maneras. Como familiar, pareja o amigo, su experiencia dependerá de su relación con la persona y de su enfermedad mental específica.
Es posible que tenga que asumir nuevas funciones o responsabilidades que antes tenía la persona con enfermedad mental. Si asume un papel de cuidador directo, su relación con la persona puede cambiar. Esto es especialmente importante para las personas que cuidan de sus parejas o padres.
Tras el diagnóstico, la recuperación de una enfermedad mental puede ser un proceso largo. Las personas con enfermedades mentales pueden experimentar fluctuaciones en sus síntomas y en su capacidad para desenvolverse en la vida cotidiana, dependiendo de la fase de tratamiento y recuperación en la que se encuentren. Es normal que su papel y sus sentimientos cambien en función de su estado de salud.
Cada enfermedad mental es diferente. Intenta informarte sobre la enfermedad mental de tu ser querido, incluidos los síntomas que puede experimentar, los posibles tratamientos y los efectos secundarios habituales de los medicamentos. Esto puede ayudarte a sentirte más seguro en tu papel de persona de apoyo, así como a participar plenamente en el cuidado continuo de tu ser querido (con su consentimiento).
Ayuda para enfermedades mentales
Si tienes, o crees que puedes tener, un problema de salud mental, puede ser útil hablar de estos temas con otras personas. Puede dar miedo pedir ayuda, pero a menudo es el primer paso para curarse, crecer y recuperarse.
Puede que quieras empezar o unirte a un grupo de autoayuda o de apoyo entre iguales. Las organizaciones nacionales de todo el país cuentan con redes de apoyo y defensores de iguales. Busca una organización que pueda ayudarte a ponerte en contacto con grupos de iguales y otros tipos de apoyo.
Implícate en tu tratamiento a través de la toma de decisiones compartida. Participe plenamente con su proveedor de salud mental y tomen juntos decisiones informadas sobre el tratamiento. Participar plenamente en la toma de decisiones compartida incluye:
La recuperación es un proceso de cambio en el que las personas mejoran su salud y bienestar, viven una vida autodirigida y se esfuerzan por alcanzar todo su potencial. Los estudios demuestran que la mayoría de las personas con problemas de salud mental mejoran, y muchas se recuperan por completo.
Organización de salud mental
Determinar qué enfermedad mental padeceA veces resulta difícil averiguar qué enfermedad mental puede estar causando sus síntomas. Pero tomarse el tiempo y el esfuerzo necesarios para obtener un diagnóstico preciso ayudará a determinar el tratamiento adecuado. Cuanta más información tenga, más preparado estará para trabajar con su profesional de salud mental en la comprensión de lo que pueden representar sus síntomas.
Los síntomas que definen cada enfermedad mental se detallan en el Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM-5), publicado por la Asociación Americana de Psiquiatría. Este manual lo utilizan los profesionales de la salud mental para diagnosticar las enfermedades mentales y las compañías de seguros para reembolsar los tratamientos.
Si padece una enfermedad mental leve con síntomas bien controlados, el tratamiento de su médico de atención primaria puede ser suficiente. Sin embargo, a menudo es conveniente un enfoque de equipo para asegurarse de que se satisfacen todas sus necesidades psiquiátricas, médicas y sociales. Esto es especialmente importante en el caso de enfermedades mentales graves, como la esquizofrenia.
Línea directa de salud mental
Si apoya a alguien con una enfermedad mental, es posible que de vez en cuando tenga que enfrentarse a problemas prácticos, económicos y emocionales. En esta página encontrará consejos y sugerencias para ayudarle. Esta información está dirigida a las personas que cuidan en Inglaterra a adultos que padecen una enfermedad mental.
No hay una manera fija de apoyar a una persona con una enfermedad mental. La forma de apoyar a alguien dependerá de usted y de la persona a la que cuida. Los siguientes apartados contienen consejos y sugerencias que pueden resultarle útiles.
Puedes informarte sobre la enfermedad acudiendo a grupos o servicios de cuidadores. Allí podrá conocer a otras personas que hayan pasado por experiencias similares y obtener apoyo e información. En la mayoría de las zonas hay grupos o servicios para cuidadores. Puede buscar en Internet o ponerse en contacto con los servicios sociales locales para informarse sobre los distintos grupos.
Hable con la persona a la que cuida sobre los síntomas que presenta cuando se encuentra mal. Esto puede ayudarte a reconocer si se encuentra mal en el futuro. Puedes hablar de la medicación que toma, cuándo la toma y si tiene efectos secundarios.